Presentamos nuestra versátil taza de entrenamiento, diseñada tanto para conveniencia como para seguridad. Con una capacidad de 300 ml, esta taza se puede utilizar tanto como una taza con pajita como una taza con boquilla, adaptándose a las preferencias de bebida de su hijo.
El cuerpo de la taza está hecho de material PP de grado alimenticio, lo que garantiza durabilidad y seguridad para el uso diario. La pajita está hecha de silicona de grado alimenticio, proporcionando una experiencia de bebida suave y flexible. Además, la taza cuenta con una funda de TPR que mejora el agarre, haciéndola antideslizante y resistente al calor, lo que protege las manitas de los líquidos calientes.
Perfecta para los niños pequeños que están haciendo la transición hacia beber de forma independiente, nuestra taza de entrenamiento combina funcionalidad con seguridad, haciendo que la hora de comer sea agradable y sin ensuciar.